¿Quién no se ha encontrado nunca con el fondo de una botella de rosado, después de una velada con amigos o de una comida en familia? En este caso, en lugar de obligarte a terminarlo, tirarlo o esperar demasiado antes de beberlo, te ofrecemos recetas del chef para cocinar con vino rosado.
Rosado claro u oscuro: cada color tiene sus propias recetas
Antes de lanzarnos a una receta, es importante saber qué vino rosado utilizar. Si no sabes mucho al respecto, una indicación puede ayudarte: el color. Cuanto más claro sea el vino rosado, más se acercará su uso al del vino blanco. Por el contrario, cuanto más oscuro sea el rosado, más se utilizará como un vino tinto.
Atrévete a utilizar adobo de vino rosado
Si seguimos la lógica del color, un vino rosado claro será perfecto para marinar carnes blancas, carnes a la brasa o pescados, mientras que un vino rosado oscuro será un buen adobo para caza, ternera o cualquier otra basura.
Para un adobo ligero de vino rosado, todo lo que necesitas es una mezcla de aceite vegetal, aceite de oliva, vino rosado, mostaza, sal y pimienta, estragón y ajo. De este modo, la carne puede marinarse durante 6 a 8 horas antes de cocinarse.
Para un adobo a base de vino rosado oscuro o vino saignée, opte por la misma mezcla, agregue 5 cl de coñac o orujo de Borgoña, además de chalotas, bayas de enebro y tomillo. Dejar marinar la carne durante 24 horas.
Cocer los mariscos al vino rosado.
Aunque estamos acostumbrados a utilizar vino blanco para cocinar navajas, berberechos y almejas, cocinar mariscos con vino rosado aporta sin embargo un toque amargo muy apreciable. Luego deberás verter un poco de aceite de oliva en una sartén caliente, luego agregar los mariscos y tapar. Pasados 2 minutos se puede añadir el vino rosado de Provenza, antes de tapar. Luego simplemente agrega cilantro o estragón, sal y pimienta, luego deja que el vino reduzca durante unos minutos.
Cocer el pescado con salsa de vino rosado.
La salsa de vino rosado acompañará con sutileza pescados como la lubina, la dorada o el bacalao. Para hacer esto, necesitarás derretir la mantequilla y el aceite de oliva antes de dorar las chalotas picadas. Luego agrega una cucharada de comino, romero, sal, pimienta y finalmente el vino. Llevar a ebullición hasta que se evaporen 2/3 del líquido y luego verter una cucharada de harina diluida en agua fría. Terminar añadiendo 10 cl de nata espesa.
Preparar un postre de vino rosado
Entre las recetas dulces que destacan el vino rosado, el granizado es imprescindible para sorprender a tus invitados. Se puede elaborar con cualquier tipo de vino rosado, la receta del granizado de vino rosado consiste en meter el vino rosado en el congelador, y rallarlo en el último minuto antes de servir, sobre frutas de verano confitadas.
¿Te gustaría probar la aventura de cocinar con vino rosado? El Domaine de Berne le ofrece vinos rosados de Provenza que se adaptan perfectamente a recetas a base de vino rosado.