Los amantes del vino siempre agradecen tener a mano una buena botella, que puedan abrir para una ocasión especial, o simplemente para darse un capricho. Pero para garantizar esta pequeña felicidad, es necesario poder conservar las botellas de vino en las mejores condiciones. La bodega de crianza se convierte entonces en un sistema de conservación óptimo.
Bodega de crianza: ¿qué es y cómo elegirla?
Las bodegas de crianza tienen como objetivo, como su propio nombre indica, mantener el vino en las mejores condiciones para permitirle envejecer y evolucionar. A diferencia de la bodega de servicio, que mantiene las botellas a la temperatura ideal para su consumo inmediato o próximo, la bodega de crianza proporciona todas las condiciones para almacenar el vino durante varios años.
Este tipo de bodega se refiere principalmente a grandes añadas, a añadas excepcionales y a grandes vinos, aptos para la crianza y que mejorarán con el tiempo.
Para elegir una bodega de crianza, conviene tener en cuenta ciertos criterios:
- Una puerta maciza, en lugar de una puerta de cristal, para proteger perfectamente el vino de la luz;
- Óptima circulación del aire, para asegurar una temperatura constante y uniforme en toda la bodega;
- Una temperatura ambiente entre 10 y 14°C(clase climática SN, SN-ST o SN-T), e idealmente, una temperatura regulable;
- almacenamiento vertical de botellas;
- consumo energético óptimo (una vinoteca de clase energética A+++ consume de media un 20% menos de electricidad que una de clase energética A++ y un 40% menos que una A+).
¿Por qué invertir en una bodega de crianza?
La bodega se utiliza inicialmente para mantener frescas las botellas de vino . Simplemente sirve los vinos blancos y rosados tal cual y recuerda sacar los vinos tintos unas horas antes de servir. Pero la bodega de crianza tiene otras ventajas.
- Almacenamiento amplio y organizado: el objetivo de este tipo de bodegas de puerta maciza es almacenar tu vino de la forma más optimizada posible. Las botellas se guardan verticalmente, en estantes organizados. Además, las bodegas de crianza pueden ofrecer una gran capacidad de almacenamiento, hasta varios cientos de botellas;
- protección contra las variaciones de temperatura: al vino no le gustan los cambios de temperatura. Así, mientras la bodega de servicio está pensada para abrirse periódicamente, dejando entrar calor o frío, la bodega de crianza asegura una temperatura ideal constante, sin variación alguna;
- Amplía tu colección de botellas: Los amantes del vino saben lo difícil que es resistirse a una oferta promocional de muy buenos vinos. El almacenamiento ya no será un obstáculo y le permitirá divertirse construyendo un bonito sótano a un coste menor;
- Tratado sobre los muy grandes vinos: antes de comprar un muy gran vino, hay que poder garantizar una conservación óptima, como es el caso de las bodegas de crianza, y que permite mejorar la calidad de su colección.
Envejecimiento del vino: ¿qué botellas? Por qué ? Cuanto tiempo ?
comprar una bodega de vino de crianza requiere plantearse varias preguntas para su uso óptimo.
¿Qué vinos son aptos para la crianza?
En primer lugar, es importante conocer qué botellas son aptas para el envejecimiento, y cuáles merecen la pena, y distinguirlas de las que pueden permanecer en sus bodegas de servicio. Pero es difícil hacer una lista precisa de vinos que mejorarán con el tiempo. Lo mejor es informarse sobre cada una de sus botellas.
En general, todavía podemos observar que determinados tipos de vinos son aptos para la crianza en función de su variedad de uva. Por lo tanto, los vinos tintos elaborados con Pinot Noir y Syrah generalmente saben mejor con la edad. Del mismo modo, los vinos blancos elaborados con Riesling y Chardonnay son aptos para la crianza.
Pero esto no es una generalidad, y es mejor informarse sobre cada tipo de vino.
Pero ¿por qué envejecer un vino?
El vino es un producto vivo, que sigue evolucionando a lo largo de su vida, e incluso después del embotellado. Garantizando unas condiciones de almacenamiento óptimas, un vino puede desarrollar aromas complejos y una estructura poderosa a lo largo de los años.
Por otro lado, este no es el caso de todos los vinos, y muchos se deterioran con el tiempo. Es por ello que es necesario elegir cuidadosamente los vinos que se guardarán en la bodega para su conservación y los que se beberán jóvenes.
¿Cuánto tiempo deben envejecer los vinos?
Una vez colocado el vino cómodamente en sus estantes de madera o metal, en condiciones ideales de almacenamiento, surge la pregunta crucial: ¿cuándo es el mejor momento para abrir una botella de vino para envejecer? ¿Cómo saber si un vino se debe disfrutar después de 5 años, 10 años o incluso más?
Una vez más, no existe una respuesta universal, ya que todo depende del tipo de vino.
En general, un vino tinto potente puede conservarse hasta 5 años , pero este tiempo puede llegar hasta 10 años para un Borgoña, 15 años para un Bordeaux Supérieurs e incluso hasta 20 años para determinadas Côtes-du-Vieux-Rhône.
Los vinos blancos son más frágiles y pueden conservarse una media de 2 años . Pero algunos vinos blancos secos de Burdeos se pueden almacenar hasta por 10 años.
¿Tiene dudas sobre invertir en una bodega envejecida? Si te gustan los buenos vinos que expresan toda su potencia con la crianza, esta compra sólo puede resultarte interesante. Luego, depende de usted encontrar las mejores añadas para construir una bodega de calidad.